La historia de España con Inglaterra ha estado llena de desencuentros que hoy en
día son palpables en especial en lo concerniente al peñón de Gibraltar, lugar
actual de desencuentros y enemistad soterrada bajo una delgada capa de apacible cordialidad oficial.
Desde la época en que los dos reinos fueron potencias
imperiales globales se ha sucedido una espiral de conflictos tremendamente contraproducentes
para ambas partes (en especial para la española) que se perpetuaran en el
tiempo si los dos países no llegan a un consenso claro y diferenciante con la situación
actual del peñón.
Ya desde bastantes siglos atrás el rol de Inglaterra en la península
ibérica estuvo marcado por la alianza luso-británica de 1373 donde las relaciones
entre británicos y portugueses siempre fueron más fluidas y cordiales que con
España con la cual se enfrentó en dos ocasiones por la independencia de
Portugal.
La situación actual de Inglaterra con España por culpa del Peñón
de Gibraltar es otro eslabón más de la larga cadena de desencuentros que han
mantenido los dos países durante su larga historia.
En el mundo globalizado en que vivimos en la actualidad
donde los puntos geográficos con cierta importancia estratégica son de suma
importancia para los países que los poseen es totalmente imposible una resolución
satisfactoria para ambas partes del conflicto del peñón de Gibraltar, no se
debe de olvidar que el peñón permite a Gran Bretaña mantener su status de gran
potencia y de aliado preferente de EEUU gracias a su potencial geoestratégico.
Los motivos principales por los que Gran Bretaña no deja ni
dejara de luchar por el Peñón no tiene nada que ver con las políticas del país,
la única razón por los que mantiene esa lucha es por el dominio del tráfico marítimo
(en especial el ruso), redes satelitales (Echelon), presencia casi que constante
de armas militares y por supuesto por los intereses geopolíticos de sus gran
aliado EEUU.
Uno de los problemas de España con Gibraltar no son de
ninguna manera los habitantes del peñón el único problema es Gran Bretaña que
los usa como cortina de humo en su beneficio para ocultar su auténtico interés militar
y geoestratégico.
Se han elaborado una cantidad ingente de informes desde hace
bastantes años por estamentos relevantes de nuestro país que dejan bastante
claro que los diferentes gobiernos británicos que han gobernado en Gran Bretaña
mantienen su presencia e interés en Gibraltar especialmente por el sistema
llamado Centro de Datos Marítimos y por la red de satélites Echelon mencionada
anteriormente.
Es desconocido por la gran mayoría de los españoles el Centro
de Datos Marítimos (MDC, siglas en inglés) uno de los más sofisticados medios
de inteligencia del mundo. Su principal objetivo es el control del paso de buques
y submarinos rusos (en especial) y de otros países por el estrecho de
Gibraltar.
Es un secreto a voces que el peñón es un punto neurálgico importante
en la realización de operaciones militares de EEUU la cual está bastante
encantada que el peñón esté en manos británicas “su aliado incondicional en
todas sus acciones de ámbito militar, económico y social”.
Recordemos algunos documentos filtrados por WikiLeaks sobre
las comunicaciones entre las autoridades españolas y el embajador
estadounidense Eduardo Aguirre en 2006. A raíz de las quejas de nuestro país por
el atraque en el Peñón de buques norteamericanos, Aguirre respondió de forma
tajante:
“La base de nuestra política exterior será agradecer a España su
disponibilidad portuaria, solidarizarnos con las preocupaciones nacionales y
ser inflexibles a la hora de defender nuestro derecho a visitar Gibraltar”.
En España
tienen la base de Rota pero según qué asuntos son más propensos a usar la base
de su gran aliado inglés.
Nuestro país no está impasible en lo referente a Gibraltar
al contrario mantiene una vigilancia constante sobre todos los movimientos que
se producen en el Peñón, esa vigilancia
en especial proviene de Algeciras donde se investiga las actividades
sospechosas, las empresas usadas para negocios turbios y cualquier actividad
del ejecutivo gibraltareño que perjudique a los intereses de España.
La polémica que se suscitó a raíz del lanzamiento de decenas
de bloques de hormigón en la bahía de Algeciras para supuestamente crear un
arrecife natural como recordareis:
¡¡Esa acción no tuvo otro fin que el de impedir a los
pescadores españoles faenar en esas aguas!! El gobierno tenía ya constancia de
lo que iba a suceder aunque no pudo hacer nada para evitarlo, esta situacion fue el
desencadenante del conflicto que como medida principal llevo a España a la instalación de
controles de entrada y salida en la frontera común con el consecuente malestar de las autoridades británicas y del peñón.
Con todo lo argumentado podemos llegar a la conclusión y
entendimiento del título de este post, ¡¡a nuestro país en estos momentos no le
interesa entrar en conflictos con Gran Bretaña a pesar de que en todos los
sentidos nuestras quejas sean razonables y acertadas!!
Cito a continuación para finalizar este post un documento
del ya fallecido Almirante Ángel Liberal Lucini:
“Aunque digan otra
cosa, al Reino Unido no le importa en absoluto el territorio minúsculo del
Peñón ni sus habitantes, como no le importó trasladar a la fuerza a toda la
población de la isla de Diego García en 1972, ni le importaron los seis
millones de habitantes de Hong-Kong. La desaparición del imperio británico ha
dejado, entre otros, el residuo del Peñón, que no solo es un símbolo sino,
sobre todo, un argumento para hablar con fuerza en las mesas internacionales y
contribuye poderosamente a que el Reino Unido sea tenido en cuenta en el mundo
de las grandes potencias. Por eso y nada más que por eso se resisten a
cumplimentar las reiteradas resoluciones de la ONU recomendando la
descolonización de Gibraltar (…) Si Gibraltar no tuviese contenido militar
desaparecería el interés del Reino Unido por conservarlo”.
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